DESCRIPCIÓN
La Oficina de Correos es un lugar de referencia para todos aquellos que necesitan enviar o recibir paquetes y correspondencia. A pesar de que en ocasiones se pueden presentar situaciones desagradables, como la que vivió Francisco Caballero Blanco, en general, la atención al cliente es excelente y el personal se esfuerza por ofrecer un servicio de calidad.Puntos a favor : - Amplia red de oficinas: La Oficina de Correos cuenta con una amplia red de oficinas distribuidas por todo el territorio nacional, lo que facilita el acceso a sus servicios a cualquier persona, independientemente de su lugar de residencia. - Variedad de servicios: Además del envío y recepción de correspondencia y paquetes, la Oficina de Correos ofrece una amplia variedad de servicios, como la gestión de giros, la contratación de seguros, la venta de material de embalaje, entre otros. - Personal cualificado: El personal de la Oficina de Correos está altamente cualificado y se esfuerza por ofrecer un trato amable y cercano a todos los clientes que acuden a sus instalaciones. - Seguridad en el envío: La Oficina de Correos cuenta con sistemas de seguridad que garantizan la integridad de los envíos y la privacidad de los datos personales de los clientes. - Precios competitivos: Los precios de los servicios de la Oficina de Correos son muy competitivos en comparación con otras empresas del sector, lo que la convierte en una opción muy interes
HORARIO
Lúnes:
De 8:30 a 14:30
Martes:
De 8:30 a 14:30
Miércoles:
De 8:30 a 14:30
Jueves:
De 8:30 a 14:30
Viernes:
De 8:30 a 14:30
Sábado:
Cerrado
Domingo:
Cerrado
Av. de la Constitución, 5, 06460 Campanario, Badajoz
F
Francisco Caballero
El empleado de ventanilla el pasado día 7 de los corrientes, en horario de atención al público, negó la entrega de un envío dirigido a "familiares de Juan Carlos Caballero Blanco" aduciendo que debía aportarse *el certificado de defunción* de éste, cuando la persona que pasó a retirarlo,
J
Jona Moreno
Voy a por un simple giro, y después de desplazarme tuve que venirme a casa sin él